Con el pretexto del fallo de Jurisdicción Especial para la Paz, JEP, de no extraditar al combatiente por la paz, "Jesús Santrich", Néstor Humberto Martínez, el fiscal al servicio de la mafia, renunció en la mañana del miércoles 15 de mayo (2019).
En su discurso dijo: “Mi conciencia y mi devoción por el estado de derecho me lo impiden”, pero poco a poco se van conociendo detalles que señalan su “devoción”, y horas después salió del país para “tomarse unas vacaciones”, sin indicar la duración de estas.
Dentro del proceso que se lleva acabo en la Comisión de Acusación de la Cámara de Representantes, contra Magistrado Leonidas Bustos, investigado por cartel de la toga, se supo que Néstor Humberto Martínez esta llamado a declarar.
Hay que recordar que Néstor Humberto Martínez, nombró como Fiscal anticorrupción a Gustavo Moreno, hombre de confianza de Bustos, cuya detención por investigaciones de los agentes del imperio, llevaron a saber de la existencia del ahora llamado Cartel de la Toga, del que Néstor Humberto Martínez haría parte.
El Cartel de la Toga, es el proceso mediante el cual personas adineradas o sus testaferros que eran investigados por la Corte Suprema de Justicia, era absueltos después de pagar millonarios sobornos a los “altos” Magistrados.
Tal como Martínez Neira, huyó del país, se cree que a los Estados Unidos, Leónidas Bustos huyo, el 28 de noviembre de 2018, con destino a Canadá con el pretexto de visitar a su hija y no regresó.
En el fallo de la JEP, se ordenaba también investigar a los Fiscales que no enviaron la documentación por la JEP requerida, así como los permisos para que los supuestos agentes encubiertos de los estados Unidos actuaran en Colombia, donde con el aval del Fiscal se habría violado la constitución y las leyes del “estado de derecho” al que dijo el ahora ex-fiscal, tener tanta “devoción”.
Dichos permisos o “asistencia”, como lo llaman, es una garantía para que, en medio de las investigaciones, no se afecten derechos fundamentales, como la privación de la libertad, lo cual sucedió con Jesús Santrich. “Es un trámite obligatorio y vinculante cuando cualquier Estado pretenda adelantar diligencias judiciales en territorio extranjero”, explica la sentencia.
Sin embargo, la Sección de Revisión asegura que la Fiscalia no realizó esta diligencia. Para los magistrados fue preocupante que, ante la ausencia de esta autorización, la respuesta de la directora de relaciones internacionales de la Fiscalía haya sido que “para el caso colombiano dichas personas serían particulares que sostuvieron reuniones con otros particulares” y, por lo tanto, no se requería.
Esa declaración dela JEP, deja en claro que con el aval de Néstor Humberto Martínez, como se ha visto en los últimos meses, los agentes de los Estado Unidos realzaba cualquier cantidad de “investigaciones” y hasta interceptaciones telefónicas de las cuales no habría escapado ni los magistrados de las altas cortes colombianas.
Aquí debemos recordar que los Magistrados de las Corte suprema de Justicia denunciaron el estar siendo interceptados, a lo que Néstor Humberto Martínez respondió diciendo que era una organización delincuencial que nunca identificó, pero que ante la huida de este se refuerza la sospecha que eran los Estados Unidos cuyo injerencia en Colombia es cada día mas abierta.
Tras la salida de Néstor Humberto Martínez, Fiscal ad hoc para el caso Odebrecht – Avala, Leonardo Espinosa denunció una serie de irregularidades en esa investigación.
Según una nota publicada por La Blu Radio, Leonardo Espinosa, que cesó sus funciones, luego de que la Corte Suprema de Justicia aceptó la renuncia de Néstor Humberto Martínez y quien fungió como Fiscal ad hoc, para el robo conocido como Odebrecht – Aval, entregó a la Corte Suprema de Justicia un informe en el que asegura, entre otras cosas, que no se dictaron órdenes de captura claves y que, bajo la gestión de Néstor Humberto Martínez en la Fiscalía, hasta se desaparecieron delitos de los procesados.
Leonardo Espinosa puso en evidencia que la Fiscalía no le imputó cargos a Otto Bula, excongresista involucrado en el escándalo Odebrecht, por los delitos de lavado de activos y concierto para delinquir, los dos más importantes.
También dice que desaparecieron de la acusación varios delitos que les habían imputado inicialmente a los empresarios que lavaron dineros de la multinacional: Federico Gaviria, Eduardo Zambrano, Gustavo Torres y Gabriel Dumar.
Advierte además que en la Fiscalía no registraron debidamente las órdenes de captura contra Eder Paolo Ferracuti, Marcio Marangoni y Amilton Hideaki, tres extranjeros claves en la investigación de los sobornos y que tampoco libraron circulares azules de la Interpol en su contra y que por ese “error” estos tres ejecutivos permanecen prófugos de la justicia desde en 2017.
Por todo lo anterior y tal como lo pidió la Jurisdicción Especial para la Paz, JEP, el fiscal ad hoc pidió investigar las actuaciones de dos de los fiscales delegados del proceso: Daniel Hernández y Álvaro Betancur.
Aparte del informe a la Corte, se conoció que Leonardo Espinosa, le remitió a la Comisión de Acusaciones de la Cámara, ente que no investiga bandidos, una solicitud presentada por el senador Jorge Robledo para que se reabra la investigación por el caso Odebrecht-Aval, contra el ahora ex-fiscal Néstor Humberto Martínez.
En pleno proceso de huida de Néstor Humberto Martínez, se dio otro delito que bien puede adjudicarse a este.
Según el noticiero CMI, minutos antes de que la Corte Suprema de Justicia, aceptara la renuncia de Néstor Humberto Martínez, cuando oficialmente dejaría de ser Fiscal, agentes del CTI de la Fiscalía, armados hasta los dientes allanaron la oficina Leonardo Espinosa, llevándose consigo todos los documentos de las actuaciones que había adelantado Espinosa en el caso Odebrecht.
Sabiendo que tal vez la misión más importante de Néstor Humberto Martínez, era proteger al Grupo AVAL, involucrado en el robo denominado Odebrecht y basados en todos los desmanes ordenados por el rufián que fingía ser Fiscal, queda el interrogante si esa fue la última orden de Martínez.
Han pasado ya tres días y el allanamiento no es reportado por ningún medio colombiano, lo que denota la veracidad de la nota y la gravedad de esta que busca sin duda, ocultar lo investigado para proteger a Luis Carlos Sarmiento Angulo, uno de los hombres que se ha enriquecido de forma escandalosa a costillas del pueblo colombiano por medio de controlar el estado.
La historia de las Fiscalía colombiana y sus jefes, desde cuando fue creada copiando el modelos de los Estados Unidos, hombres que aparentan ser honestos, pero esta abiertamente al servicio de la mafia.
El ex fiscal Luis Camilo Osorio esta directamente relacionado con el paramilitarismo, Montealegre fue asesor de Carlos Gustavo Palacino, el ‘cerebro’ de Saludcoop, donde se robaron al menos dos billones de pesos, Mario Iguarán, fue abogado de Carlos Arturo Neira Llache, el cerebro del desfalco conocido como Interbolsa, pero todos ellos son unas mansas palomas comparados con Néstor Humberto Martínez que dejo muchos montajes donde encarcelo a gente inocente, no investigó a Odebrecht y a menos a sus socios el grupo Aval, dejo tres asesinados con cianuro y hasta encubrió la violación de la soberanía colombiana.
Algunas personas han visto en la renuncia de Martínez una oportunidad de limpiar la Fiscalía, pasando por alto que en Colombia a un funcionario malo lo reemplaza uno peor y teniendo en cuenta de quienes elaboraran la terna para Fiscal, los miembros de la banda de los uribeños, no tengan duda de que vendrá uno peor.